Nos acusan a los militantes activos de los sindicatos y
personas implicadas en el trabajo y en el
desarrollo y mejora de las condiciones laborales y sociales de los
ciudadanos que solo damos excusas y no
planteamos ningún proyecto serio. Y lo dicen los que solo saben usar excusas y
meter miedo.
Con la excusa de la
crisis nos están quitando derechos conquistados mediante la lucha, el
sacrificio, e incluso la muerte de nuestros antepasados.
Con la excusa de la
crisis nos quitan el derecho al trabajo, y nos lo cambian por la
posibilidad de…¿ Quieres trabajo? -Ya
sabes lo que hay, lo que yo diga y sin rechistar.
Con la excusa de la crisis nos han
reducido los salarios unilateralmente y nos suben el IVA, reduciendo nuestra
capacidad adquisitiva y poniendo en peligro la supervivencia de muchos
comercios y establecimientos que necesitan de esos menguados ingresos.
Con la excusa de la crisis hacen pagar a
nuestros ancianos por sus medicinas y por la atención de nuestra salud,
mientras ellos no pagan a las farmacias y cierran consultorios médicos.
Con la excusa de la
crisis paralizan la ley de la dependencia desmantelando los servicios
sociales y abandonando a los discapacitados de nuevo a tener a la familia como
única posibilidad de sobrevivir.
Con la excusa de la
crisis se recorta la inversión y se sacrifican los estímulos a la actividad
económica.
Con la excusa de la crisis quieren que tengamos miedo y no luchemos
por nuestro futuro.
Nos han inculcado el miedo a perder lo que se tiene, “no
hago huelga porque me descuentan 80€”,(…tranquilo, en breve alguien decidirá
que cobras mucho y te suprimirán el plus por los festivos o por las noches, o
la productividad. O te quitaran la posibilidad de adaptarte tu horario para
cuidar a tus hijos o padres, o decidirán
qué qué es eso de tener… ¡¡un mes de vacaciones!! ¿ pagadas?, ¡ no hombre
no!...15 días y sin cobrar). O a hacer
horas extras por necesidades de la empresa…¡y sin cobrarlas claro!
Nos han inculcado el miedo a ejercer de ciudadano
criminalizando la protesta; hablando y acusándonos de yayoflautas,
indocumentados, marginales e incluso de violentos. Manipulando y emitiendo
hasta la saciedad videos de 5 exaltados en una manifestación de cientos de
miles de personas.
Nos han inculcado el miedo al compañero, “…si hago huelga yo
y el no, a mi me echaran”. No, probablemente os echaran a los dos cuando vean
que tenéis miedo y no respetáis vuestro
trabajo ni vuestra capacidad… ¿ Como podéis defender a la empresa si sois incapaces
de defenderos vosotros?
Vemos como fruto de la propaganda y de la manipulación de la
mayoría de medios de comunicación se ha extendido un discurso antisindical, con
el evidente objetivo de eliminar el último muro que se interpone en su proyecto
de suprimir el estado del bienestar. Un discurso antisindical que
lamentablemente muchos trabajadores y trabajadoras han hecho suyo y con el que
sectores de asalariados, autónomos y
funcionarios proyectan la frustración de una realidad hostil y dura; recogiendo
y aplaudiendo el mensaje de quienes le han abocado a este caos. De aquellos que
especulaban con el fruto de su esfuerzo y que no dudaron en arriesgar todo por
un punto mas de beneficio en bolsa o invirtiendo en ruina (des)organizada y
ahora pretenden enseñarnos el camino de la salvación como nuevos dioses.
Paradójicamente quienes más celebran el ataque a los
sindicatos y a los derechos laborales y más se posicionan en contra de este
derecho constitucional a hacer huelga, también ven sus nominas mermadas. Cada día
aumentaran sus impuestos, tendrán menos y peores servicios públicos y además
también tendrán sus puestos de trabajo en peligro. Y ya no habrá nadie para
tratar de defenderles.
Porque hay que conseguir la retirada de la reforma laboral y
reforzar las prestaciones por desempleo para que los ciudadanos puedan seguir
generando actividad económica.
Porque hay que realizar una autentica y decidida lucha
contra el fraude.
Porque no se puede rescatar a los bancos con dinero público
mientras ellos (los bancos)con ese dinero falsean sus balances y se dedican a embargar y desahuciar a sus clientes
menos afortunados.
Porque hay que volver a preocuparse por
los ciudadanos y menos por los mercados..
Porque justamente en estos tiempos es cuando hay que
reivindicar mas accion, mas presencia en la calle, mas sindicato, mas
solidaridad, mas esfuerzo conjunto de todos y
en beneficio de todos.
Porque sin sindicatos, sin trabajadores, sin el apoyo de tu
compañero, el retroceso sera total,
¡¡Porque solo lo que se defiende puede no
perderse!!