A la mañana siguiente, el cuerpo estaba un poquitin alterado, yo no se si serian los nervios o los restos de alcohol, que no se habían digerido bien, pero mi cuerpo no estaba para muchos trotes. ¡¡Uno ya esta mayor, para según que cosas!! Madrugamos, a las siete y cuarto de la mañana estábamos ya camino del coche a dejar las maletas, desayunar algo en un bar cercano, donde comimos el día anterior, y coger el metro hacia el sitio.
Desayuno bien, café con leche y media tostada, mientras en el local, la mayoría de la gente esta de retirada, con cervezas y cubalibres. A las ocho de la mañana nos metemos en el metro y nos vamos hacia la prueba. Llegamos aproximadamente a las 9,00 (los domingos la frecuencia es menor), a las 9¨20h, llegamos al lugar del examen y empezamos a ver la acumulación de gente que allí se encuentra. Vemos las listas de admitidos y teníamos todos los que íbamos por promoción interna, que examinarnos en el mismo aula. Nos encontramos con unos compañeros del centro de al lado y otro de Villena que también iban a examinarse, pero de otro tema; y ya formamos grupillo hasta que entramos, charlando de nuestros centros y de lo jodida que es la administración y bla….., bla…, bla……
También coincidimos con los dos chicos que encontramos la tarde anterior, y nada nos dimos ánimos y seguimos hablando.
A las 9.45 abren las puertas de la Facultad y pasamos todos hacia nuestro sitio el Aula Magna. Pero son puntuales, a las diez en punto sale, el presidente del tribunal examinador y empieza a nombrar uno a uno, a todos los que nos encontrábamos allí, empezó por orden alfabético tanto de categoría como de persona. Pasamos, y empezó la explicación de en que iba a consistir el examen y como iba a ser la realización, el tiempo (75 m) y nos dan las instrucciones para rellenar el cuestionario. Por ultimo nos dan el examen y aproximadamente a las 11, empezamos a hacer la prueba.
La primera impresión es…..
No…... Esto aquí no J….., eso en otro...
Vale; tienes razón eso en otra.
Yo acabe el examen un poco mas tarde que mi compañero y salí aproximadamente a las 11, 40. Es decir todavía me sobro mas de media hora. Nos encontramos en la puerta y ya nos encaminamos hacia el metro para empezar a ir a casa.. Este fue el momento en que mas pesado se puso mi compañero. Hasta ese momento el viaje estaba perfecto, no voy a decir que no pareciese el, porque sus tics y sus modos eran los de siempre pero mas suavizados, se le notaba mas relajado, hablaba moderadamente, pero en ese momento ya volvió a ser el que conocemos.
Yo pensaba que no iba a poder “aguantar la presión, viejo….”, pero si. Fue duro, todo el viaje en Metro, con las preguntas del examen, y despotricando contra todo y contra todos. Afortunadamente, tras tomarnos una cañita al llegar a la estación, antes de coger el coche, ya se volvió a relajar y acabo bien.
Salimos de Madrid, aproximadamente a la 13,40 y yo recordaba un restaurante en Mota del Cuervo donde comí con mi mujer la ultima vez que vine a Madrid, es decir cuando se suspendió el examen que acababa de realizar y aguantamos un poquito hasta llegar hasta allí. Llegamos al restaurante, una cañita, y al comedor. La comida excelente, un entrecot de rechupete lastima que el beber agua no te deje apreciar mejor los sabores. Pero es lo que hay, las normas son las normas
Paradita en La Roda para un café rápido y comprar miguelitos de crema y ya el ultimo estirón. A las 6 de la tarde dejaba a mi compañero en Alicante y ya me iba hacia mi pueblo.
Llegue, guarde el coche y se acabo.
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